Condiciones y escenarios que dificultan la acción del terapeuta
La terapia: relación entre individuos y subjetividades a través del discurso
Fortes de Lef, J., Et al. (2009). El terapeuta y sus errores. Reflexiones sobre la terapia.
Al respecto mencionan:
La terapia constituye una relación entre consulta antes y terapeuta (y las voces de un superior, colegas, comunidades profesionales, sociales, políticas, religiosas, etc.) a partir de una demanda y el suministro de un servicio: la atención y el saber del terapeuta, para lo cual fue entrenado. Aparecen multiplicidad de procesos que buscan atender la demanda terapéutica y que repercuten tanto los consulta antes como en el terapeuta.
El terapeuta construye sobre su conocimiento de la teoría y la práctica clínica sus propias experiencias de vida, así como su relación terapéutica con los consulta antes, en la que surge un flujo de conocimiento en diferentes esferas. Es por ello un proceso de co-construcción de conocimiento, de los otros y de sí mismo, en el que los integrantes de ese espacio participan desde sus diferentes posiciones.
Es importante reconocer el saber del terapeuta, quien cuenta con un conocimiento teórico y clínico, basado en años de formación, que pone al servicio de la demanda terapéutica. El que el terapeuta a su oposición -a partir de sus saberes- en la conversación terapéutica no implica una relación de dominio con los consultantes. Más que pretender establecer relaciones igualitarias en el espacio terapéutico, considere importante trabajar construyendo relaciones equivalentes o equitativas, para reconocer diferencias (de saberes, de género, origen étnico, racial, religioso, social) incorporar las a un diálogo respetuoso. Si bien es cierto que igualdad no es sinónimo de equidad, considero que esta última reconoce la presencia de diferencias, que incorporan la diversidad al diálogo, donde el criterio de igualdad puede oscurecer su presencia y significado (…).
El sistema terapéutico se desencadena en una multiplicidad de procesos en los que el terapeuta y consulta antes resuenan, convergen y divergen. No podemos marcar un límite rígido e inflexible entre los mundos del terapeuta y los consultantes: se trata de una compleja interacción de dos mundos y sub mundos, de los consulta antes como sistema y como subsistemas individuales, los mundos en la vida personal y profesional del terapeuta, así como los contextos sociales y políticos que intervienen en el proceso terapéutico. Es importante conocer también su diferencia: lo que separa la vida de cada uno en esta interacción de subjetividades que se da en el proceso terapéutico, incluida la diferencia entre los espacios del terapeuta y los consultantes.
Dr. Alvaro Silva